Boletín No. 12
Vol 2 No 9, septiembre 2006
LA VERDAD I
Por Ricardo Vivas Arroyo
Muchas veces la Verdad nos lastima, como la luz cuando estamos en la oscuridad; tenemos que parpadear y esperar que nuestros ojos se vayan adaptando. Así es necesario hacer para asimilar la verdad, que nuestro corazón esté dispuesto y la repase varias veces hasta quedar convencido de ella (2 P. 1:12-15, 1 Jn. 2:21, Fil. 3:1).
La verdad nos libera del error y sus consecuencias, porque nos revela que estamos cautivos de ideas equivocadas, de costumbres contrarias a la voluntad de Dios y de temores heredados (Jn. 8:31-32). El apóstol Pedro nos asegura que Cristo nos vino a rescatar de las vanas costumbres que recibimos de nuestros padres. Es por nuestro estilo de vida que a veces se torna más difícil asimilar la verdad (1 P. 1:18-21). El evangelio no debe
acomodarse a las costumbres de la gente, sino mostrar la verdad como un estándar al que se deben ajustar, dispuestos a modificar todo aquello que consideraban correcto pero no lo es (Hch. 14:11-18, 17:23-31).
Si la verdad no nos retara a cambiar, si no confrontara nuestros pensamientos y costumbres, no tendría sentido, sería cómo aceptar que es lo mismo tomar buena leche que leche adelgazada con agua y no preocuparnos por ver a nuestros hijos desnutridos (1 P. 2:1-3). La verdad es el alimento de la fe. Si estamos seguros de algo que no es verdad, aunque lo
practiquemos con sinceridad, no nos ayudará porque no viene de Dios. Es por eso que la Biblia nos habla de convertirnos a Él, para corresponder a la verdad.
Cuando San Pablo predicó en Éfeso, quisieron lincharlo porque su mensaje iba contra sus costumbres, no obstante muchos aceptaron la verdad y se convirtieron al Señor (Hch. 16:20-24). La cultura o costumbres de los pueblos son vanidad y es necesario confrontarlas con los principios de Dios y convertirse de ellas a Dios (Hch. 14:8-17). Así se propagó el evangelio al principio, produciendo arrepentimiento y conversión por todos lados, afectando las formas de vida de las comunidades (Hch. 19:26-40).
Pero cuando la conquista del nuevo mundo no fue así, el catolicismo, con su evangelio pervertido, en vez de convertir a los indígenas, adaptaron la religión a sus costumbres, y los nativos siguieron celebrando sus ritos a sus dioses, a los que sólo les cambiaron los nombres para cristianizarlos. Así, Tonatzín, diosa del maíz y la fertilidad, siguió siendo adorada en el mismo lugar, en la misma fecha y con las mismas danzas, lo único que se hizo fue cambiarle el nombre a Guadalupe, promoviendo la idolatría. No los convirtieron al evangelio, porque ellos falsearon la verdad y quedaron atrapados en su propio engaño (Gá. 1:6-10).
Sé que si no has leído la Biblia y por primera vez estás leyendo algo así, te puede lastimar, pero si crees que la Biblia es la verdad que Dios nos entregó, asimílalo y conviértete al Señor. Con respeto y esperanza de que me sigas considerando tu amigo, te hablo con la verdad, porque lo único que deseo es alumbrarte con su brillante luz para que seas verdaderamente libre (Jn. 8:32). ¡Dios te bendiga!
MOTIVOS DE ORACIÓN
Orar por el grupo de evangelismo, que Dios lo siga usando poderosamente en diferentes lugares del país y en la iglesia, para que Dios salve a muchos y que los dones del Espíritu Santo operen abundantemente.
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Orar por los cultos de casa, que crezcan y que la iglesia se involucre más. ¡Ánimo hermano amado, tu iglesia espera que con cariño le sirvas! En especial para que se reanude el culto de Lindavista y alguien ofrezca su casa con mucho cariño para servir al Señor.
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Orar por las visitas del hermano Ricardo a las iglesias, en octubre a la iglesia Pan de Vida de Polígonos 3, en Ecatepec.
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Orar por el presidente electo de México, para que Dios obre y gobierne a nuestro amado país de acuerdo a su plan para su iglesia y que haya paz social.
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También es importante orar por un retiro de matrimonios al que somos invitados para los días 14, 15 y 16 de diciembre. Será en un hotel de 5*, con las 3 comidas en buffet, camino a Ixtapa de la Sal, cuyo costo por persona es del orden de $2000.00 ($4000.00 por pareja).
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Recuerden que el equipo de oración se encuentra intercediendo continuamente por las necesidades que se van presentando en la iglesia cada día. Dios ha obrado maravillas. ¡Gloria a Dios!
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Seguimos orando y creyendo que Dios nos dará un lugar propio, adecuado para el funcionamiento de la iglesia local. Si amas a la iglesia no dejes de interceder por ello y déjate guiar por el Espíritu Santo en lo práctico.