Retiro de matrimonios noviembre 2007

La familia es muy importante para Dios. Familias fuertes hacen iglesias fuertes. Entre la pareja se dan diferencias, malos entendidos, fricciones y hasta falta de respeto. No hay pareja que no tenga problemas, aún las más espirituales tienen que trabajar mucho para que las cosas marchen bien.

Antes que el ministerio está la familia, Dios no nos permite cuidar a su iglesia si fallamos en el cuidado de los nuestros (1 Ti. 3:5).

La Biblia tiene respuesta y provisión para todos los asuntos de la pareja y de la familia. Tiene un modelo, tiene recursos, tiene sabiduría y tiene poder para tener victoria y ser dichosos en el hogar y poder servir a Dios con toda la casa (Jos. 24:15).

Este evento es organizado por la iglesia Renovando para Servir y es la segunda ocasión que se realizará.

El evento se llevará a cabo en el hotel Ideal de Ixtapan de la Sal, los días 1, 2 y 3 de noviembre. El costo es de $1,000. por persona, incluyendo hospedaje y alimentos. El transporte es aparte. La fecha límite de inscrpción es el 15 de octubre. Debes escribirnos en CONTACTO y darnos tus datos: Tu nombre completo, el de tu esposa, el de tu iglesia. Si actualmente no estás bien con tu pareja y asistirás sólo, háznoslo saber. Es necesario recibir nuestra respuesta de aceptación, para poder inscribirse y cubrir los gastos, depositando en la cuenta que te daremos para asegurar tus lugares, ya que, por razones obvias, el cupo será limitado a las habitaciones disponibles.

Tiempos de compañerismo alrededor de una fogata y participar de los alimentos juntos en un hermoso lugar, son vacaciones excelentes para renovar nuestros votos, reconciliarnos y recibir la gracia de Dios para fortalecer el amor de pareja, todo a la luz de su Palabra y su Espíritu Santo, es algo inolvidable y maravilloso.

Los temas a tratar serán:

Niveles de relación de la pareja

Tres enemigos del matrimonio

Cuatro errores de la pareja

Problemas de comunicación entre la pareja

Sexualidad cristiana

El cupo es limitado, anótate cuanto antes y asiste con verdadera expectación de recibir de Dios abundantemente. ¡Dios te bendiga!